domingo, 24 de octubre de 2010


Dame tus huellas para usarlas de zapatos.
Dame tus dudas para hacerme una pulsera.
Usa mis manos para hacerte una escalera, hasta las nubes y volar a donde sea.
Mienteme un poco para mantenerme atento.
Hazme una hamaca con el menguate de la luna.
Dame tu risa, para los tiempos en veda.
Quitate el peso de los besos que te sobren.
Es tan dificil respirar, el aire en que no estas...es tan dificil
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miércoles, 13 de octubre de 2010

Si todos nos diéramos cuenta de lo corta que es la vida tal vez viviríamos más a pleno. Vivimos quejándonos. Siempre nos falta algo, y hasta me animo a decir que ese algo que nos falta ni siquiera es muy necesario para nuestra existencia, ese algo no nos completa. Perdemos el tiempo sufriendo por pavadas, ambicionando más y más. En vez de perder el tiempo mirando las estrellas, riendo, contemplando el sol o simplemente haciendo esas cosas que realmente nos llenan. Saben cuantas veces me preguntaron: “ y, salió el sol?” y no supe contestar, seguramente estaba en mi nube pensando en miles de cosas insignificantes, y automáticamente pienso en la gente presa, en la gente que no tiene la posibilidad de mirar el sol todos los días y ahí me dan ganas de estar todo el día disfrutándolo. Tenemos miles y miles de cosas que se nos hicieron costumbre y no las valoramos (me hago cargo de mi parte). Son como esas cosas que archivamos en un placard viejo sin darles importancia y cuando no las encontramos nos desesperamos. Con la vida es lo mismo, la vida no es eterna, no la tenemos comprada, las etapas se acaban, nada es para siempre. En cuando nos distraemos plácate! eso que creíamos eterno, se fue. Muchas veces paro un poco la moto y miro todo lo que deje atrás, me agarra un poco nostalgia pero se muy bien que lo disfrute, y otra veces me torturo sabiendo que pude haber disfrutado mucho mas. Por eso, de ahora en más voy a preocuparme menos por cosas que no valen la pena y a preocuparme mucho más por esas cosas que me hacen realmente feliz.